En uno de nuestros talleres de educación sexual, un chico nos comentó hace unos días que no entendía por qué hay que celebrar el Orgullo, “¡si cada quien puede acostarse con quien quiera sin problema!”.
Esta afirmación, que puede ser verdad para muchas personas, merece varias reflexiones:
1. El “orgullo” no está relacionado sólo con poder tener relaciones con quien queramos, no va sólo de quién nos atrae o de quién nos enamoramos. Es decir: no se refiere sólo a la orientación del deseo. Tiene que ver con la diversidad sexual. Con poder ser y expresar quienes sentimos que somos. Y como esa diversidad todavía no es reconocida por toda la sociedad, y todavía hay personas que quieren imponer unas normas sociales respecto a “cómo han de ser (y mostrarse)” los hombres y las mujeres, pues hay que seguir celebrando como una forma de reivindicar el valor de la diversidad.
2. Claro. La mayoría de las personas (en nuestro país) deciden cuándo y con quién tener encuentros que son íntimos, pero…en realidad esto no es sólo una cuestión privada. Hay una dimensión pública, política, en esta decisión, porque todavía se sigue discriminando y sancionando en muchas ocasiones a las personas por “con quién se acuestan”. Sigue habiendo burlas, acoso, agresiones físicas y países donde, por ejemplo, la homosexualidad está prohibida (¡¡¡!!!). Así que hay que celebrar como una forma de reivindicar que se respeten los derechos humanos.
Así que estos días “del orgullo” sirven para celebrar la diversidad y además para reivindicar derechos. Por eso cuando se dicen cosas como: “Y, ¿para cuándo un día del orgullo heterosexual?” no se está teniendo en cuenta que las personas heterosexuales no necesitan “celebrar” que lo son, porque no se las discrimina, juzga o castiga.
A veces también oímos frases como: “Pero, ¿es necesario vestirse de esa forma? Van tan exagerados que echan por tierra todo lo que defienden”. Pues verás. Es que a veces para reivindicar hay que “hacerse ver” y ampliar los límites, de manera que tengamos suficiente espacio para todas las expresiones.
¿Sabes lo que le contestó al chico del taller un compañero? Que claro que hay que mostrarse cuando lo tuyo se discrimina. “Cuando te dicen que eres [pon aquí una etiqueta relacionada con la sexualidad, el color de la piel, el sitio de origen…] tienes que darte una palmada en el pecho y decir “SÍ, ¿QUÉ PASA?”.